Encontrar una posición confortable para favorecer el descanso es muy importante. Desde un punto de vista científico, la posición de dormir recomendada es de costado, preferentemente en el lado izquierdo, con las rodillas ligeramente dobladas. Esta posición reduce la hinchazón y la retención de agua, impidiendo así que el peso del feto presione contra los órganos internos y los vasos sanguíneos. El uso de una almohada diseñada específicamente para apoyar plenamente los cuerpos de las mujeres embarazadas, ayuda a prevenir el dolor de espalda, al tiempo que promueve la posición de dormir de costadp, lo que mejora la calidad del sueño. De hecho, el apoyo en las dos rodillas y tobillos promueve la alineación correcta con las caderas y ayuda a prevenir el dolor y la inflamación del nervio ciático, garantizar el pleno confort.